Tener la piel hidratada siempre es fundamental, pero en la época veraniega, en la que lógicamente sufre una mayor deshidratación es preciso poner todavía más empeño en lograrlo. Afortunadamente no es nada difícil de conseguir. Bastar con seguir ciertas indicaciones que, aunadas a algunos tratamientos hidratación de la piel, la mantendrán en perfectas condiciones sin que haya que renunciar a disfrutar de los días de sol.

¿Cuáles son las principales causas de deshidratación de la piel?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que, aunque sea fácil confundirlas a simple vista, una piel deshidratada no es lo mismo que una piel seca.
El principal problema de la deshidratada es que le falta el agua precisa para mantenerse saludable, mientras que la piel seca produce menos sebo del normal, algo que ocasiona que no tenga los lípidos que se necesitan para retener la cantidad de agua necesaria en ella.
Las causas de la deshidratación pueden ser muchas. En verano lo más frecuente es que sea por la exposición a los rayos ultravioleta. Durante el otoño y el invierno están también las calefacciones, el hecho de ducharse con agua demasiado caliente y hasta ciertos jabones.
Las células de la piel tienen de por sí un mecanismo de hidratación natural, pero cuando este se ve alterado por factores tan frecuentes durante el verano como la exposición al sol o las temperaturas extremas esta cantidad de agua va disminuyendo, ocasionándose así la deshidratación.
La lógica subida de temperatura de la piel a causa del calor del verano también hace que nuestro organismo pierda mucha agua. Para que te hagas una mejor idea, en verano el cuerpo pierde más de dos litros de agua al día.
Signos externos de una piel deshidratada
Si bien hemos dicho que no es lo mismo la piel seca que la deshidratada, comparten algunos signos externos. Por ejemplo, el hecho de estar especialmente sensibles.
Una piel deshidratada puede apreciarse de forma extrema cuando presenta síntomas como una mayor facilidad para hidratarse, un aspecto agrietado y apagado, tirantez y una textura áspera.
¿Qué se puede hacer para evitar la deshidratación de la piel?
Aunque siempre es importante mantenerse hidratado, todavía lo es más en verano, ya que en esa época de altas temperaturas nuestro cuerpo pierde alrededor de dos litros de agua diarios. Y es que la deshidratación empieza cuando empezamos a perder más agua que la que tomamos.
Bebiendo la suficiente cantidad de líquidos diaria (no es imprescindible que todo sea agua, también puede completarse esto con otras cosas como zumos o bebidas isotónicas) evitarás no solo la deshidratación, sino también diversos problemas de salud.
Eso sí, es importante que predomine el agua en los líquidos que ingieras, ya que sus sales minerales son cruciales para el correcto cumplimiento de todos los procesos celulares. Si faltaran el sodio y el potasio podríamos estar hablando hasta de una deshidratación severa en la piel.
Al igual que es fundamental hidratarnos por dentro, también es preciso que lo hagamos por fuera ayudándonos con tratamientos de hidratación de la piel en verano y también con cremas corporales y faciales.
Tratamientos y consejos para mantener hidratada la piel de cuerpo y rostro
Siguiendo ciertas pautas podemos mantener una piel hidratada en cuerpo y rostro. Algunos de estos tratamientos son especialmente necesarios durante la época veraniega o cuando esta acaba de pasar.
A pesar de que nuestra piel está compuesta en un 70% por agua, cuando abusamos de la exposición solar se pierde ácido hialurónico. Éste es vital a la hora de mantener la hidratación de la piel. Una de sus funciones más importantes es atraer y retener el agua del cuerpo en la piel manteniéndola elástica, firme e hidratada.
Estas son algunas de las principales cosas que puedes hacer para contribuir a la correcta hidratación de tu piel:
- Una correcta alimentación con una dieta rica en frutas y verduras. Pero ademas incluyendo alimentos ricos en colágeno como huevos, pollo, frutas, pescado, ajo, cebolla o carnes rojas.
- Utilizar exfoliantes que contribuyan a regenerar las capas más superficiales de la piel a la vez que eliminan las células muertas. Eso sí, sin excesos, para que no llegue a haber irritación o descamación. Con una o dos veces a la semana será más que suficiente.
- Diversos tratamientos de medicina estética en los que se apliquen diferentes sueros y vitaminas a la vez que se hidrata y oxigena la piel. Los masajes relajantes e hidratantes también pueden proporcionar excelentes resultados.
- Aplicarse cremas y otros productos hidratantes específicos que incluyan propiedades regenerativas. Los sérums son muy eficaces a la hora de cuidar la piel. Su elevada concentración en componentes activos es capaz de penetrar hasta en las capas más profundas de esta.
- Usar protector solar en cualquier época del año, y no solo en verano como suelen hacer muchos. No debemos olvidar que la exposición al sol es una de las principales causas de la deshidratación de la piel.
- Consulta con tu esteticista de Blue Stetic Madrid: tenemos los mejores tratamientos de hidratación de piel en verano para que tengas una piel bonita, cuidada y sana.